Verdades y mentiras de los brackets de autoligado (DAMON)
Brackets
En los últimos años, las casas comerciales han realizado campañas masivas de publicidad con la finalidad de promocionar el uso de los brackets de autoligado, también conocidos como sistema Damon. La siguiente información pretende darte a conocer los mitos y realidades acerca de estos brackets sin interés económico alguno y con información apegada estrictamente a evidencia científica. Espero que esta información te sirva a poder tomar una mejor decisión con respecto a cómo tratar tu problema de alineación de dientes y mordida, así como saber si son los indicados para ti.
Brackets o frenos de autoligado (Damon)
Estos brackets de autoligado Damon, ¿Son mejores que los brackets convencionales?
Definitivamente no. Simplemente son un tipo de brackets o frenos distintos a los sistemas tradicionales; donde en vez de utilizar la liga o elástico para fijar el alambre al bracket, éste posee una pequeña tapa o clip que evita el uso del elástico o liga para fijar el alambre. Al final del camino es tan sólo una técnica más que se puede utilizar para realizar un tratamiento de ortodoncia. Este tipo de bracket de autoligado existen desde hace ya muchísimos años, simplemente se ha tomado una vieja idea con nueva tecnología que ha permitido darle un tamaño igual a los brackets tradicionales.
Existe una gran cantidad de compañías que fabrican los brackets de autoligado desde hace muchos años, siendo los más conocidos los Damon.
¿Son verdad todas las ventajas que supuestamente tienen los brackets de autoligado Damon sobre los tradicionales?
No. Como todos los sistemas de brackets éstos ofrecen ventajas y desventajas. Es muy importante diferenciar entre la publicidad que manejan las casas comerciales y la evidencia científica descrita en las investigaciones serias. Entre éstas se mencionan:
1. Disminución en el tiempo total de tratamiento.
2. Fuerzas más biológicas y por consiguiente menos daño a las raíces.
3. Elimina la necesidad de hacer extracciones de dientes permanentes para hacer espacio “desarrollando ” las arcadas dentarias.
3. Menor molestia que los brackets convencionales.
4. Mejor estética en la sonrisa y perfil facial así como una mayor estabilidad del tratamiento cuando es terminado el mismo.
A continuación intentaremos responder cada uno de estos puntos con conceptos basados en evidencia científica y no en la publicitad descrita por las casas comerciales.
1. Si utilizo brackets de autoligado o sistema Damon en vez de unos de ligado convencional, ¿Puedo disminuir el tiempo de mi tratamiento de ortodoncia?
Uno de los principales argumentos para utilizar este tipo de brackets Damon es precisamente que no se causa una fricción entre la ranura del bracket y el alambre al “detenerlo con la tapa” en lugar de amarrarlo con algún tipo de ligadura o elástico para ejercer la presión necesaria, y poder así crear las direcciones de fuerza necesarias para poder mover los dientes. En el sentido estricto, si se evalúan estos brackets de autoligado sobre un alambre, se disminuiría significativamente la fricción del bracket sobre el alambre. Sin embargo, debemos recordar que en la boca existen raíces embebidas en el hueso y que al aplicar una fuerza sobre el diente con el alambre, se producirá un efecto que se conoce como ” binding” que es la fricción que resulta del contacto activo del alambre con la tapa de los brackets de autoligado al realizarse un movimiento de ortodoncia en la boca.
Todos los estudios científicos serios concuerdan en que estos brackets pueden llegar a disminuir en un pequeño porcentaje, la velocidad del tratamiento sobre todo en etapas de alineación de los dientes . Sin embargo, el tiempo total de tratamiento difícilmente se puede ver disminuído debido a otros factores biomecánicos que se ven involucrados y que determinan el tiempo total de tratamiento.
Si utilizo brackets o frenos de autoligado Damon, ¿Evito que me realicen extracciones de premolares para alinearme los dientes por tener los mismos tan chuecos?
Definitivamente, no. La extracción de dientes permanentes no tiene relación con el tipo de brackets o técnica de ortodoncia que se utiliza para realizar el tratamiento. El hueso de las corticales (pared interna y externa de la de ambos maxilares no es posible ” formarlo ” o “desarrollarlo” tan sólo con una fuerza ortodóncica para conseguir alinear los dientes. A pesar de que es posible expandir en pequeña proporción las arcadas para lograr más espacio con el fin de alinear unos dientes moderadamente chuecos, si esta expansión se realiza en exceso se puede causar serios problemas en su hueso o encías a largo plazo.
El argumento comercial sin evidencia científica alguna que lo respalde, es que estos brackets de autoligado o sistema Damon al ejercer fuerzas más ligeras sobre los dientes, es posible alinear los mismos sin necesidad de realizar extracciones debido a que son capaces de ” formar nuevo hueso y desarrollar las arcadas” siendo una aseveración totalmente falsa.
El diagnóstico final para decidir entre realizar la extracción de dientes y no hacerlo, debe de apegarse exclusivamente a un adecuado diagnóstico y plan de tratamiento con parámetros muy bien establecidos para ofrecerle al paciente el mejor de los resultados sin comprometer la integridad de los dientes, hueso y encías.
Al utilizar los brackets de autoligado en mi boca en lugar de utilizar los de ligado convencional, ¿Tendría menos molestias a lo largo del tratamiento, así como disminuiría los riesgos de presentar alguna secuela en mis dientes o encías como consecuencia del tratamiento de ortodoncia?
Definitivamente, no. A pesar de que el argumento comercial menciona que al ser las fuerzas más ligeras sobre los dientes la molestia y el dolor del ajuste de los brackets es mucho menor que con las técnicas convencionales. Estudios científicos demuestran que el dolor después de cada ajuste es igual o mayor a los brackets convencionales debido a que la fuerza que se ejerce sobre los dientes no depende de si un bracket es de autoligado o no.
La realidad es que a pesar de que en el aspecto teórico es posible disminuir la fuerza con los brackets de autoligado, muchos son los factores biomecánicos que pueden contribuir a incrementar la fuerza sobre los dientes durante un tratamiento de ortodoncia; tales como el tipo de la aleación del alambre, la distancia interbracket y el grado de flexión del mismo.
4. Al utilizar los brackets de autoligado, ¿Voy a conseguir una mucho mejor sonrisa y perfil facial después de mi tratamiento de ortodoncia en comparación con los brackets tradicionales?
Este es quizás uno de los argumentos comerciales que tiene una absoluta falta de evidencia científica, debido a que el resultado final de la sonrisa y del perfil facial de cada paciente al término de un tratamiento de ortodoncia, depende exclusivamente del diagnóstico y plan de tratamiento propuesto específicamente para cada paciente. Al final la técnica utilizada es tan sólo un vehículo para conseguir el resultado deseado.
Entonces, ¿Qué beneficios tiene utilizar este tipo de brackets de autoligado entre los que se encuentra el sistema Damon?
Una ventaja de los brackets de autoligado es que permiten visitar al ortodoncista con menos frecuencia, ya que requieren menos ajustes. El especialista elimina las ligas de color que fijan el alambre al bracket, lo que simplifica el tratamiento al supervisar solo la evolución. Además, son una buena opción para pacientes fumadores o quienes consumen bebidas que manchan las ligas, como café o vino tinto. Los brackets de autoligado estéticos o de porcelana no utilizan ligas transparentes, que tienden a mancharse y necesitan ser cambiadas con frecuencia. Esto no solo mejora la estética, sino que también reduce la necesidad de visitas frecuentes al ortodoncista. En resumen, estos brackets ofrecen comodidad y una mejor apariencia durante el tratamiento.
Sin embargo, el uso de brackets de autoligado o técnica Damon, no tiene injerencia alguna tanto en la decisión de un tipo de tratamiento como podría ser entre realizar extracciones o no en un paciente, acelerar el tratamiento de ortodoncia o bien, conseguir mejores resultados estéticos al final del tratamiento.
Referencias
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American Journal of Orthodontics and Dentofacial Orthopedics, Vol. 134, Issue 5, p646–651. November, 2008
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